jueves, 4 de octubre de 2012

Rojo





Flor de loto bajo nieves rojas de invierno,
fría la sangre que mancha tus cabellos...
En el aire se desplaza tu último suspiro,
en la tierra yace nuestro legado y destino.
Flor de loto bajo el lodo de las lágrimas,
las que remuevo acariciando la tierra que pisaste.

Sakura Atsushi







Roja sangre para el planeta llamado Rojo, roja materia como las amapolas y las mejillas de los niños bajo el sol cuando juegan con las cometas, rojo era el lazo del destino que ataban nuestras manos y rojo es el dolor que yace enterrado en mi pecho donde mi alma grita por la soledad que cae sobre mis hombros. El dorado de las estatuas salpicadas por el rojo de vuestras venas, mis queridos hermanos, aún prevalece. Las calles desérticas parecen gritar las últimas ofertas de los puestos de los productos recién sacados de la tierra donde vieron crecer nuestras esperanzas, las mismas que cayeron en aquel atardecer.

Las lágrimas aún manchan mis ojos como ríos caudales, caen en mis labios convirtiéndolos en mares salobres donde se mezclan con los quejidos de mi alma. Puedo sentiros, queridos y apreciados familiares, de igual modo que una vez os sentía a mi lado en las plácidas tardes de verano y frente a la hoguera en el invierno.

Las risas de mis hijos ya no alegran las cortas jornadas después de esforzarme como guardián de palacio, mi esposa no acaricia mis hombros ni me tiende un té caliente tan amargo como la vida misma, mi padre no viene de visita con una cesta de tomates recolectados de su huerta y mi madre no suspira mientras teje un nuevo tapiz. La vida se ha detenido entre estas ruinas desquebrajándose, volviéndose dolorosa y a la vez me suplica este mundo que permanezca cuidándolo. Un cementerio, eso es Marte, lo que fue una vez un vergel oculto tras ilusiones de tierras baldías.

Todo se ha vuelto rojo y negro. De luto voy mientras mis pies descalzos dejan huellas de sangre recordando vuestro sufrimiento y el nuestro. Los doce Guardianes jamás os olvidaremos, los doce supervivientes de la gran tragedia siempre mantendremos un crespón negro en nuestras almas y así como plegarias tiñendo nuestras bocas. 


Diario fechado el 2 de Febrero del año 3000

Sakura Atsushi, Guardián de Los Colosos de Marte


----------------------------Rojo-------------------------------


Sakura Atsushi es un Oráculo, por lo tanto personaje Canon. Su evolución ha sido algo intensa y muy convulsa, sin embargo en estas líneas su usuario ha querido arrojar el sentimiento compartido por todos los que como él han perdido sus raíces, su felicidad y gran parte de sus almas.

domingo, 16 de septiembre de 2012

Memorias de un pirata





"A veces siento nostalgia de esos días caminando por la tierra, el olor a asfalto recién empapado por la lluvia fina de media noche. La luna se veía jodidamente impresionante desde allí, entre las calles llenas de drogas, perversión, libertad a veces, sueños de borrachos a cual más bohemio, niños que lloraban en sus cunas y taxistas esperando hacer una buena carrera. Nací en los 80's, una época convulsa sobre todo para mi país, España, y para su capital, Madrid. Lejos de una dictadura muy cercana que aún te marcaba como si fuera ganado, ahí en lo profundo del alma, convirtió a los jóvenes en lobos salvajes que buscaban lo que yo ahora busco: Libertad.

Nací como vampiro, crecí como esclavo y casi muero como un despojo junto a mi hermano. Éramos alimañas que engendrábamos un odio terrible al hombre que nos azotaba con cadenas, laceraba nuestra piel o fustigaba nuestras almas con veneno. Liberados de la prisión en la cual nos encerró nuestro padre, derramando su sangre y la de varios inocentes, nos hicimos partidarios de no tener nuevos grilletes. 

La Era espacial no estaba muy lejana, contemplábamos la Luna como imbéciles soñando con pisarla. Una jodida ironía ahora que puedo verla enorme, blanca y sin misterio. Allí están los científicos llevados por medios de seres de otros mundos que siempre llamamos demonios, una vieja base militar de los entes de luz que confundíamos con ángeles tan abandonada como impresionante, y mucho polvo estelar de cientos de románticos que aún sueñan con pasearse por su superficie. Y como digo, no estaba lejos la Era espacial pero lo que más cerca teníamos era la era del rock, el metal y cualquier derivado. Estrellas de escenarios a piratas espaciales, estrellas del robo y la libertad.

Diario de abordo del 16 de Septiembre del 3000"

Escribía mis memorias, de nuevo, para poder concentrarme en las tareas habituales de capitán. En ese momento apareció aquella oscura figura de mirada penetrante y voz cavernosa aunque con cierto timbre melódico. Su túnica no contrastaba demasiado con la decoración de mi nave, pero sí su presencia. Él era un Oráculo, el amante de mi hija y el padre de mi primer nieto.

-Amaury, ¿podríamos hablar?-quedó en medio de la sala de control observándome.

-Ahora mismo, dame cinco minutos.-dejé el papel a un lado oculto entre varios libros para caminar por la nave en su compañía, teníamos que aprender a conocernos y aceptarnos tal cual éramos.

Sí, uso papel... los vampiros no renunciamos jamás a nuestras manías. 








Amaury William Rose 

Capitán de la Tardis

Navío Estelar Pirata 




-------------- Memorias de un pirata----------------


Es un texto realizado por Amaury, usuario de Beyond Hell, para publicitar el foro y darle mayor trama a su navío. 

Amaury es uno de los personajes Canon del foro. 

La imagen ha sido realizada por Olivia, administradora y personaje Canon. 

sábado, 15 de septiembre de 2012

Beyond Hell - Publicidad


El mundo está sumergido en un caos tan oscuro que puede palparse con la punta de los dedos, nuestros pulmones están llenos de residuos tóxicos, el asfalto cubre decenas de hectáreas de bosques protegidos, el ser humano ha vendido su alma y por tanto también el futuro del ser vivo que habita.

El amor no es un sentimiento agradable, se ha dejado atrás, la codicia lo oculta con sus garras mientras araña la superficie del planeta buscando mayores riquezas. La esclavitud es habitual en la sociedad en la cual vivimos. El hambre y el poder están en una balanza poco agradecida con la conciencia humana. El ser humano ya no puede llamarse ser humano, es una máquina de guerra estúpida en posesión de seres superiores. 

Demonios sostienen el mundo como Atlas, pero con una sola mano mientras se enorgullecen de ello. Los ángeles han decidido dejar de llorar, luchar y orar para convertirse en sordos y mudos. Otras razas están desapareciendo mientras derraman lágrimas por el Universo que una vez amaron, admiraron y fue su hogar. 

Pronto todos serán parias y desheredados... 


¿Lograrás imponerte? ¿Te unirás a la legión de seres oscuros? ¡Toma partido!

Esta es una guerra por la supervivencia, no hay facciones... SÓLO TOMA TU MEJOR ARMA Y SOBREVIVE AHÍ FUERA. 


Beyond Hell. 

viernes, 7 de septiembre de 2012

Silencio




Percibía las sensaciones de la leña crepitando en la chimenea, el olor a roble del suelo y los muebles impregnaba mientras el jabón de las sábanas me recordaban a las flores que podía contemplar desde mi ventana. En algún lugar de este mundo había perdido la noción del tiempo, el espacio y de mi mismo. Me hallaba allí arrojado como si fuera un muerto en vida, algo que sin duda era. No recordaba mi nombre, sólo que una vez tuve uno, y mi cuerpo dolía como si las ascuas vivas de la chimenea me acariciaran. Los largos cabellos negros que cubrían la almohada debía reconocerlos, pero ciertamente de no ser que estaban atados a mi cabeza hubiera supuesto que eran de otro. Mis manos estaban colocadas con la palma impuesta hacia el colchón, quise mover los dedos pero no podía. Todo mi cuerpo parecía pesado y ligero al mismo tiempo. Mis ojos inspeccionaban inquieto los recuerdos alojados en las paredes, como si hubieran sido colocados con cuidado para que yo reaccionara.

-Vaya, ya has despertado.-una voz femenina cubrió el silencio arropándolo con un suave y dulce tono de voz.-No esperaba que lo hicieras, realmente no esperaba siquiera que respiraras un día más.-se acercó a mi conmovida y llena de esperanzas que fueron desvaneciéndose a medida que yo no reaccionaba.-¿Recuerdas quién soy?-no pude negar porque mi cuerpo era el de una marioneta sin hilos.-Mi ángel, ¿recuerdas quién soy?-acariciaba mi rostro suavemente y sonreía de forma amarga.

Sus ojos eran enormes y profundos, tenía unas pestañas pobladas y rizadas de color dorado, sus cabellos eran rubios y caían sobre su espalda aunque ya poseía alguna cana que denotaba que estaba envejeciendo. Su cuerpo era delgado, o más que delgado seco, mientras que sus manos eran suaves aunque sus arrugas fueron arrojándose sobre sus dedos aprisionándolos con deseo y gula.

-Mi dulce ángel.-susurró inclinándose para besar mi frente.

Recordé los besos, pero no a ella. Más bien recordé la calidez que unos besos similares recorrían mi frente, la misma que puede sentir un niño que duerme en su cuna plácidamente. Eran los besos de una madre, la cual parecía abnegada y llena de esperanzas. No quería rendirse y proseguía con sus preguntas.

-¿No recuerdas mis besos?-preguntó tomando mi mano derecha entre las suyas.-¿París? ¿Londres? ¿Recuerdas al menos la nieve?-dijo con dulzura.-No envejeces y yo pierdo la esperanza, porque sí lo hago mientras que tú sigues hermético.-comentó desolada.-Al menos has abierto los ojos una vez más, hace más de cincuenta años que esperaba que lo hicieras.-apretó mi mano mientras sus ojos se cerraban intentando aguantar las lágrimas, las cuales terminaron derramándose por sus mejillas hasta sus labios.-¿Qué es lo que viste para quedar de este modo? ¿Qué te pasó en aquella guerra?-se apartó de mi gritando llena de dolor, cayendo sobre el suelo mientras sollozaba.

Pasaron así horas escuchando sus quebrantos, la historia de un hombre que al parecer la había deseado y tocado con lujuria, el mismo que yacía sobre la cama sin reconocerla mientras fuera seguía la vida y dentro se mantenían los recuerdos de alguien que ya no era él sino yo.

De eso hace más de diez años, ella repite sus preguntas cada mañana mientras espera que un nuevo milagro ocurra. Realmente no recuerdo siquiera su nombre, ni ella ha sido capaz de decirlo. Tampoco sé el mío, porque nunca se ha dirigido a mi a no ser por apelativos que únicamente se le da a un hombre que ha compartido lecho. La que una vez pensé que era mi madre sin duda era mi esposa. Decía que yo era un ángel, realmente un ángel, pero que ella sólo era una hechicera que perdía el juicio al ver que yo ni siquiera era capaz de preguntar por el hijo que nunca tuvimos.  

Esta noche se ha ido y dice que no regresará, no puede atenderme porque su corazón se agrieta y de alguna forma el mío siente que pierde algo que jamás supo apreciar realmente. ¿Habrá llegado mi final? ¿Qué vi realmente en aquel lugar? Ni siquiera puedo detenerla, sólo veo como su frágil cuerpo se va consumiendo mientras se aleja hasta la puerta que jamás volverá a abrirse. 


------------------Silencio--------------------


Silencio es un texto sin principio ni final, realizado íntegramente con personajes que no existen aunque muestran una realidad. Los ángeles pueden perder la memoria, igual que otras razas, e incluso pueden ser lesionados. También habla del corazón que se fractura, los ángeles como los demonios poseen un corazón de mineral y no uno que sea realmente un músculo. 

El creador de este texto es el usuario de Caim.


martes, 4 de septiembre de 2012

Amado




Todo comienza con un deseo, con un anhelo en donde los mayores temores se desvanecen y solo queda aquello que parece puro y bueno…

El deseo de amor llevó a una pequeña híbrida a caminar por las ruinas de un antiguo y majestuoso planeta donde se albergaron los grandes señores del destino, quienes veían el porvenir de las demás razas que jugaban a creerse dueños de su suerte.

Un alma rota entre la soledad y la muerte que vagaba entre las tumbas de sus seres amados, llorando en silencio aun por aquellos que la fatalidad había arrebatados de sus manos; encargado por propia voluntad de guardar esas ruinas se encontró con un alma que estaba a la mitad dividida en dos mundos completamente incompatibles.

Así dos seres que clamaban por amor, uno del pasado y la otra de un futuro se encontró, una nueva esperanza nació y dos corazones rotos se unieron como uno para formar un ser que sería un nuevo inicio.

Amado, oráculo de nacimiento llego a un mundo con mucha esperanza, sus padres Atsushi, un oráculo antiguo que había sobrevivido a la catástrofe en su Marte natal, y Amanda, una hibrida hija de un ángel y un vampiro que vagaba en busca de su padre y del amor, lo amaron como a nada en el universo. Él era el renacimiento de aquellos seres perdidos, y como tal con la dignidad que embargaba a su raza fue el orgullo de su padre y su historia comienza aquí, donde ella escribe de su propio puño y letra.

19 de agosto, creo que esa es la fecha, mi madre nunca ha sido buena con eso de organizarse, es el día en que me toca comenzar mi nueva vida, una donde yo sea el dueño de mis actos y a pesar de que a mi padre se le dificulte el dejarme ir creo que estará bien. Hoy con mi abuelo comenzare a viajar, tengo que ver aquellos mundos de los que mi padre me habla con tanto orgullo, sobre todo la Tierra. Aun no entiendo que lo deteste yo sé que se puede recuperar, es posible si lo intentamos, creo que en eso soy igual a mi madre, no pierdo la fe ella es así por algo viajo tanto tiempo buscando mi abuelo.

Acaba de entrar mi madre, aunque parece más mi hermana creo que el que la hayan detenido a los 21 años fue la mejor idea, con su clara piel y sus ojos verdes, ella es un ángel por donde se la mire y sin embargo lleva muy presente la sangre de mi abuelo, cuando los veo discutir sé que ella es su hija sin dudas pero ahora que guarda mi ropa en silencio con aquella mirada melancólica es tan hermosa. Siempre será una niña al lado de mi padre, pero quién diría que los dos congeniarían tan bien al ser tan diferentes y ahora se sentó a mi lado no me dice nada, no con palabras puedo ver sus ojos que lo expresan todo como siempre, cuando hacia alguna travesura o repetía algo que Amaury o Sebastián me enseñaban a decir.

Sus manos cálidas son el mejor refugio de un niño por más de 1000 años y ahora que ya van más de 1800 años siguen siendo los que más deseo cuando los malos sueños vienen a atormentarme, ya sale después de dejarme dinero en los bolsillos y besos en las mejillas. Ahora sé porque mi padre la ama de esa manera, y creo que no exista nadie que no la ame en todo el universo.

Bien ahora que estoy solo debo recordar cual es mi destino, quiero ir a la Tierra, quiero ver que es lo que sucede allí porque fue ese lugar el causante del caos en el universo.

Cuando he tomado el bolso para salir mi padre estaba en la puerta de mi cuarto, así callado como siempre aquella estatua solemne que siempre fue, el que recuerdo desde que tengo memoria y como era cuando yo crecía, no pude hacerlo feliz por completo, se de mis hermanos muertos y de su primera esposa, jamás me ocultaron nada pero sé que ahora es mi momento de irme, no puedo permanecer atado a un lugar debo cumplir una misión. Pocas palabras como siempre, las justas y necesarias para que me cuide y regrese a casa pronto más por mi madre aunque sé que no admitirá que por el también así que solo asiento y salí.

Venus estaba soleada, mi madre se quedó en la casa, el calor le sienta mal siempre es por su naturaleza de ángel solo mi padre me acompañó a la nave de mi tío y mientras caminaba por aquellas calles por las que había corrido de niño no pude evitar sentir algo de nostalgia. Tendría que regresar pronto al menos por mi madre. Cuando subí a la nave tuve que soportar las tonterías de mi tío, era increíble que lleváramos la misma sangre pero por mi aspecto era más que obvio que sí.
Esta nave se mueve mucho, apenas entiendo lo que escribo pero es necesario que lo haga lo prometí a mi madre ella piensa que me ayudara aunque sé que fue idea de mi padre, para tener informe detallados de mis actividades. Pero… era de esperar mi tío pregunta cómo me va con las mujeres, ellos miden todo su éxito debido a las mujeres con las que me relaciono aunque no es raro conociendo a mis padres que a mí eso no me interese.

Creo que sus historias son difíciles, interesantes en su modo los dos tan marcados por esa soledad tan devastadora y yo que prefiero estar solo aunque eso será complicado ahora pero será hasta que llegue a la Tierra.

Una vez en la Tardis mi abuelo me recibe se ve tan orgulloso cuando me mira, quizás porque le herede la forma o porque soy un gran guerrero, después de los siglos de entrenamiento con mi padre le he ayudado a salir de un par de problemas lo que mi madre nada sospecha, esa mirada me pone nervioso, no sé cuanto la merezco y cuando llegan mis tíos puedo verlos con ese aura como el de mi madre, será que por ser hijos de un ángel y los saludo pero me meto con rapidez en mi cuarto.

El peso de una vida es demasiado como para cargarlo en un viaje tan lejano, pero como dejarlo todo para andar como un nómada por tierras abandonadas, la nave toma el rumbo a mi destino y los sermones de todos aquellos con los que crecí no se hacen esperar de a uno pasan por mi cuarto aunque solo Román mi tío, viene a darme su apoyo.

Dejo claro que no sé qué es lo que me esperará, no sé qué es lo que pasará en la Tierra, pero es mi aventura y comienza en este instante.

--------------------Amado----------------------

Aún en nuestros dominios, en Beyond Hell, es sólo un feto que se está desarrollando en la hija de Amaury William Rose, uno de los capitanes del gran buque de guerra espacial llamado Tardis. Él es fruto de uno de los Canon Oráculos, Sakura Atsushi, y de Amanda Rose. 

El texto ha sido creado por la usuaria de Amanda.

La mayor locura de un científico





-¡Eres un imbécil! ¡Jamás vas a cambiar! ¡Ya no te soporto!

Un fuerte portazo se escuchó tras sus palabras, añadiendo un nuevo muro a una convivencia desastrosa. Hacía meses que ni siquiera estábamos de acuerdo en la lista de la compra. Me odiaba. Sabía que no había más que un enorme odio entre nosotros, aunque yo aún recordaba entre mis brazos el peso que tuvo al nacer y el aroma de sus geles infantiles. Había crecido demasiado rápido o mi trabajo se hizo cada vez más pesado. Las horas extras que invertía antes para crear máquinas eficientes en la actualidad eran para dar alma a un monstruo de hojalata, como así veía mi hija a los cyborg y robot que yo construía.

Sophia era una mujer adulta a sus ojos, una niña a penas para mi. Con sus diecisiete años tenía una lengua puntiaguda que no dudaba en clavar en mi corazón. Las lágrimas no fluían en su presencia, me mostraba impasible mientras acomodaba mis gafas que conjugaban a la perfección con mi bata de laboratorio.

El silencio invadió todo. Las fotografías de mi esposa reflejaban un orgullo que ya no había, desde que ella murió Sophia había añadido a su toque rebelde convencional el sarcasmo y la dureza a sus palabras, cada vez más certeras y más contundentes. Ella desconocía mi nuevo proyecto, en el cual estaba inmerso desde que ella cumplió catorce años y enterramos a nuestra Marie.

Recorrí el pasillo desde el salón al comedor para descender al sótano. Mis hombros estaban caídos y tras el cristal de mis gafas mis ojos derramaban las primeras lágrimas. Tomé un pañuelo de mi bolsillo de tonos violetas, el color favorito de mi esposa, bañado en su colonia para enjuagar mis lágrimas que eran fruto de la derrota.

-Marie, no sabes cuánto te necesito.

Susurré encendiendo la luz de aquel lúgubre cuarto sin ventilación alguna salvo el potente extractor del techo. Miré el montón de chatarras que se encontraban a un lado en una mesa parecida a la de un quirofano y suspiré hondamente. Mis pasos se detuvieron ante la cabeza dorada de mi nueva criatura provocando que sonriera al ver su rostro, aquellos rasgos que durante más de veinte años había adorado y casi venerado como si fuera la misma Virgen María.

-Nunca te dije cuánto te amaba, quizás porque creía que lo sabías con sólo una mirada cansada en las noches y un beso a desganas. Eras el bálsamo a mi pesada carga, el trabajo se hacía ameno cuando escuchaba las cintas que dejabas para mi recordándome que debía almorzar y hacer algo de ejercicio. Marie, no sabes cuánto te he amado y estoy seguro que jamás lo sabrás.

Me incliné besando sus labios fríos y sintéticos, para después dejarla en su lugar y proseguir, no sin esfuerzo, mi escrupuloso trabajo rellenando cientos de informes con miles de datos de pruebas realizadas a mi primer prototipo.

-Un día lo conseguiré y Sophie comprenderá que está equivocada. Tú serás la prueba.


------------La Mayor Locura de un Científico------------


El relato muestra el insufrible dolor que soporta Mark Washington cada día. Narra el momento en el cual su hija se marcha de casa para vivir con sus abuelos y sus deseos de volver a ser una familia, reconquistando el corazón de Sophie, a la cual ve aún como una niña y no como una adolescente en plena pubertad, y regresando a los minutos antes de perder a su esposa en un trágico accidente. 

Marie es su pasado, presente y futuro. A penas tiene subvenciones, ha sido olvidado a pesar de haber llegado a la cima científica y también en la materia de robótica. Busca transmitir el alma de su esposa, o la personalidad de esta, a un robot autónomo que pueda pensar por si misma y amar como ella lo hacía. 

Es un texto realizado por el usuario Caim, parte del equipo Administrativo de Beyond Hell, para promover este personaje y que al fin encuentre dueño. Puede poseer una trama extensa e incluso llegar a tomar parte de un papel principal en ciertos momentos cruciales para Beyond.

sábado, 1 de septiembre de 2012

Una verdad silenciada



Saturno, un paraíso de hielo donde los cristales de diversas tonalidades azuladas atraparon la luz para crear vida. Entre los bosques blancos cargados de aromas diversos, plantas que sobrevivían al gélido paraíso de calma aparente que era el planeta. Las criaturas comenzaron a surgir del corazón del planeta, algunas eran increíblemente hermosas y letales. El nacimiento de los ángeles provocó una nueva era. Sin embargo, Saturno y sus lunas se convirtió en un mundo diminuto comparado con el resto del Universo, el cual comenzaba a poblarse de almas de distinto poder y sentimientos.

El Planeta Tierra, debido a su belleza y a las criaturas frágiles que soportaba, fue el primer lugar a explorar y cuidar. Una legión de ángeles se dirigió convertidos en asteroides con aspecto de estrellas fugaces hacia el planeta, era pleno verano y llamaron a la lluvia Perséidas. Esta lluvia fue el inicio de otras muchas que contempló la humanidad y el inicio de nuevos mitos y leyendas.

Un viejo texto ha llegado hasta nosotros revelando una verdad silenciada por la incertidumbre y la incredibilidad. Entre enormes montones de olvidados libros, tan pesados como varios sacos de cemento, se hallaba arrugado, desteñido y milagrosamente conservado la hoja de un diario de uno de estos seres.


Estoy seguro que en ocasiones olvido mi procedencia, el cálido sol que convierte mi piel fría en tibia es tan agradable que menosprecio sus efectos en mi poder. Allá en el lugar donde provengo poseo mayor fuerza y destreza, y sin embargo ante los hombres soy un Dios. La dulce paleta de colores en el cielo me provoca preguntas más allá de todo lo que sé. Conozco asombrosas verdades contrastadas, no existen seres superiores a nosotros aunque sí iguales aunque temibles y destructivos.

El viento sopla suavemente entre las hojas de los árboles, la luz incide creando figuras en la hierba fresca cargada aún con el rocío de las primeras horas de la mañana, la frescura danza entre las copas y a ras de suelo cerca de los hongos. Las aves han comenzado a desplegar sus alas, a cuales más vistosas, de igual modo los insectos.

Me he refugiado en los bosques, territorio de mi hermano, donde puedo meditar mejor sobre mi destino. He sufrido terriblemente, las misiones en este mundo que he protegido están disminuyendo y creciendo la influencia de hechiceros nocivos y seres creados por las sombras. Puedo sentir su huella en sus almas reflejadas en sus miradas y palabras. Están comenzando a olvidar el equilibrio natural, la bondad o la belleza de los sentimientos confortables como aquellos que generan la amistad.

Mi espada cada vez es más pesada, así como la carga que colocan en mis hombros. He dejado de ser Apolo para ser llamado por mi nombre original. Han denominado a mi raza como ángeles y a los oscuros como demonios. Soy el arcángel Rafael, guardián de los caminos y la mano que cura a los heridos, ya sean de cuerpo o alma. Pero estamos perdiendo la batalla, aunque mate a un demonio dos vienen a ocupar su lugar.

Quedé aquí intentando olvidar el amor que sentía por Olivia, la única mujer que he amado realmente, pues mis energías deben concentrarse más hacia metas que sí puedan ser rebasadas. Si bien no sirve de nada si las misiones son ya cosas de locos. Es el inicio del siglo XX, la contaminación ha aumentado paulatinamente cada vez más, de igual modo que se contamina mi alma con los celos y miedos. Mi corazón tiene nuevas grietas, puedo notar como en ocasiones se escapan pequeños estallidos de luz. He logrado dominar el sentimiento entregándome a la causa, dejando atrás el dolor para adentrarme en la felicidad de cuidar a todos aquellos que me necesitan, como necesitan a los que ya se marcharon arrepentidos de dar demasiado por nada. Si continuo aquí es por los humanos y por ella, cuanto más alejado esté mejor será para su felicidad y para mi corazón.

Espero que ocurra un milagro. Si los humanos se dejan influir por el lado oscuro que poseen sus almas, allá donde los demonios llegan con eficacia, se transformarán en seres carentes de control de sus propias vidas y terminarán hundidos en mundos desérticos donde la comida no germina y el agua no recorre los valles.

Continuaré en unas horas con mi camino, ahora deseo observar uno de los escasos amaneceres que aún se pueden contemplar sin miedo a encontrar edificaciones en la lejanía. Extraño a mi mellizo, sólo espero que pueda mantenerse alejado de las frías garras de mi tío y sus pretensiones políticas."

------------------------Una verdad silenciada------------------

Este texto está escrito por Rafael, usuario de Beyond Hell, dedicado a todo aquel que desee conocer el pasado para poder comprender el futuro, así como a todos aquellos que se hallan en su corazón y en especial a Olivia.